Existe una cierta controversia sobre la conveniencia o no de tomar café en la lactancia. Pero lo cierto es que los investigadores no encuentran una relación directa entre el consumo de cafeína y los problemas de sueño o irritabilidad en los bebés.

La asociación Americana de Pediatría califica el café como un alimento seguro y de bajo riesgo para el lactante, especialmente si no se superan las cantidades recomendadas.

Como sabemos, la cafeína no solo está presente en café, también puede encontrarse en infusiones, refrescos y algunos medicamentos.

El riesgo de que el bebé tenga problemas de insomnio, nerviosismo, sueño ligero va a depender de la dosis ingerida, pero también del tiempo transcurrido de su consumo hasta el momento de la toma del bebé y, como no, de la susceptibilidad del pequeño.

Hay bebés muy sensibles y a los que una mínima ingesta afecta de manera casi inmediata, y otros con gran capacidad de tolerancia, incluso cuando el consumo es elevado.

Si eres de las que disfruta con el sabor y el aroma de un buen café, te alegrará saber que no tienes porqué renunciar a este placer.

¿Puedes tomar café en la lactancia?¿Qué cantidad?

Puedes tomar café en la lactancia, siempre y cuando tengas en cuenta cuánto y cuándo puedes tomarlo.

Una vez que ingerimos una bebida con cafeína, como en este caso es el café, esta pasa enseguida a formar parte de la leche. Se calcula que su efecto en el organismo registra un pico en torno a la hora u hora y media desde la ingesta.

Esto significa que puedes amamantar a tu bebé con menos riesgos si lo haces inmediatamente después de haber tomado tu taza de café, o bien si dejas pasar un mínimo de dos horas.

La cantidad de cafeína recomendada tanto en el embarazo como en la lactancia es de 300mg/día máximo. Eso equivaldría a unas 2-3 tazas de café al día.

Se calcula que a un lactante le puede llegar a través de la leche materna entre el 7-10% de la cantidad ingerida por su madre.

Pero también hay que tener en cuenta que el metabolismo durante los cuatro primeros meses de vida es bastante más lento en los bebés que en los adultos.

Esto quiere decir, que la cafeína en los bebés más pequeños y prematuros permanece durante más tiempo en sangre. El tiempo medio de eliminación, de pocas horas en adultos, puede llegar a los 3-4 días en recién nacidos.

¿Alteraciones de sueño o de humor provocados por el café en la lactancia?

Hay que dar crédito a los trabajos de investigación realizados en grandes grupos de población en los que no se ha podido señalar a la cafeína como agente en la relación causa-efecto, entre las madres que van a tomar café durante la lactancia y los bebés que muestran alteraciones del sueño o del humor durante este periodo.

Ahora bien, hay que ser prudentes. El consumo de cantidades excesivas, como medio litro o más de café al día, sí que puede estar relacionado con problemas de anemia y déficit de hierro en madre y en lactante y, por su efecto vaso constrictor, con el doloroso fenómeno de Raynaud en el pezón en la madre lactante.

Podemos concluir después de todo esto, por un lado, que el café es un alimento compatible con la lactancia.

Siempre que se respeten las dosis máximas, y por otro, que debe ser la madre la que, basándose en la observación y el conocimiento, decida la mejor manera de seguir disfrutando de café con la tranquilidad de no estar alterando ni causando efecto alguno en su bebé.

Tiempo de Café