Si te gusta disfrutar del aroma y el sabor del café recién molido, pero no tienes el tiempo o la destreza de un barista para prepararlo, una cafetera superautomática es tu mejor opción.
En las cafeteras superautomáticas la extracción y la elaboración del café se realiza de la misma forma que en las automáticas, sin que intervenga el usuario más que para ponerla en funcionamiento. Es decir, tu café preferido de la manera más rápida y con tan solo tocar un botón.
Pero, ¿qué cafetera superautomática comprar? Para no dar demasiados datos técnicos que pueden causar confusión, nos limitaremos a descubrirte las claves para acertar en la elección de tu cafetera superautomática.
El molinillo, la molienda o el grupo de infusión, aspectos a tener en cuenta
- Tipo de molinillo. Todas estas cafeteras tienen molinillos para moler el grano justo antes de preparar el café. Ahora bien, hay dos tipos de molinillos: los que son metálicos (acero inoxidable) y los cerámicos. Si el molinillo es metálico y haces un uso intensivo, se puede llegar a recalentar en exceso, quemar el café y acelerar el proceso de oxidación. El resultado por lo tanto, no es el óptimo.
Los molinillos cerámicos, por el contrario, tienen mejores prestaciones. Se recalientan menos, son más silenciosos, más resistentes y permiten hacer un uso más intensivo de la cafetera.
- Grado de molienda. Las cafeteras superautomáticas ofrecen la posibilidad de ajustar el grado de molienda. Ten en cuenta que cuantos más grados de molienda, más podremos calibrar la intensidad y la consistencia del café.
Los niveles más bajos corresponden a un molido más fino, lo que se refleja en un café más fuerte y con más crema. En cambio, en los niveles mas altos la molienda es más gruesa. El resultado, un café más suave, pero también menos cremoso y más aguado.
- Grupo de infusión. Este es el componente principal de la cafetera superautomática y es donde se elabora el café después de haberse molido. Tienes que fijarte en si es extraíbleo no. Si no lo es, puede ser un inconveniente porque dificulta la limpieza de la máquina de café, uno de los puntos claves para obtener un café de calidad.
- Depósito del agua. No es un elemento decisivo, pero lo deberás tener en cuenta, sobre todo si el nivel de consumo en casa o en la oficina es alto. Una cafetera de tamaño estándar tiene un depósito de agua de unos 1,8L, bandeja de goteo de 0,5L y una capacidad para granos de café de 300 g. Con estas dimensiones te da para preparar 12 bebidas sin necesidad de recargar el depósito.
Otros aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir qué cafetera superautomática comprar
- Sistemas automáticos de limpieza. La mayoría de cafeteras superautomáticas cuenta con sistemas de limpieza que de forma automática limpian los conductos para que no queden restos de bebidas anteriores. También puedes ajustar el nivel de dureza del agua para que la cafetera te avise cuando tienes que hacer el proceso de descalcificación.
- Espumador de leche. Las ventajas de un espumador manual es que te permite espumar o emulsionar la leche a tu gusto. Además la limpieza, al ser un elemento externo, es muy rápida y sencilla.
- Café personalizado.En un cafetera superautomática puedes ajustar o regular muchos elementos: intensidad, aroma, cantidad de café, cantidad de leche, cantidad de espuma, cantidad de agua, grado de molienda y temperatura hasta crear tu combinación ideal. De esta manera, puedes guardar tus propias “recetas” y crear perfiles de usuario. Esta opción es muy interesante, especialmente si sois muchos en casa o si se va a usar en una oficina.
- El precio. Finalmente, llegamos a uno de los aspectos más cuestionados a la hora de hacer cualquier compra: el precio. La gama media de cafeteras superautomáticas suele estar entre los 500 y los 700€ aproximadamente y la gama alta entre los 1000-1500€. La diferencia entre una y otras radica en la calidad de los componentes. Así que tienes que tendrás que tener en cuenta el uso que le vas a dar para sacarle el máximo partido.
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