Los amantes del café prefieren el café en grano para preparar su bebida favorita. Es más, en torno a su elaboración establecen un ritual que comienza moliendo el grano.
Sin embargo no es el único tipo de café que existe. Por ejemplo, con el café soluble podemos preparar unas buenas y ricas bebidas. ¿Sabes qué es el café soluble?
Algunos creen que el café soluble es artificial o no es café. Se equivocan. El café soluble es café al que se le ha eliminado el agua. El método de producción es muy sencillo: se hace una infusión de café y posteriormente se le extrae el agua que contiene. El resultado es un polvo 100% café o unos cristales de café deshidratados.
Así, cuando los mezclas con agua o leche esos cristales vuelven a convertirse en café listo para consumir. De ahí que también se conozca como café instantáneo.
¿Cómo surge el café soluble?
Aunque con anterioridad había habido varios intentos de crear café soluble o instantáneo que no tuvieron mucho éxito, fue en 1930 cuando Nestlé logró dar con la receta perfecta.
La crisis de Wall Street trajo consigo el colapso de los precios del café. El gobierno brasileño, buscando una solución a los excedentes de su producción cafetera y tratando de evitar la caída de precios en el mercado internacional, se puso en contacto con Nestlé para el desarrollo de unos «cubitos de café» que pudieran disolverse fácilmente en agua caliente, sin alterar el aroma y el sabor.
El resultado ya lo conocemos: en 1938 nace Nescafé, el primer café instantáneo industrial y el más vendido en todo el mundo. Y gran parte de ese éxito fue debido a los soldados norteamericanos que lucharon en la Segunda Guerra Mundial. Para ellos, el café soluble Nescafé era uno de los productos más apreciados, ya que les permitía disfrutar de un delicioso café recién hecho. Al finalizar la guerra estos soldados fueron los mejores embajadores de Nescafé.
¿Cómo se obtiene el café soluble?
El café soluble es una infusión de café a la que posteriormente se retira el agua. Pues bien, para retirar ese agua se pueden utilizar dos técnicas: la aspersión o secado por atomización y la liofilización.
En el secado por atomización, la infusión de café pasa a través de una boquilla y se rocía formando una gran aspersión de gotitas de infusión. Al pasar a través de una torre con aire seco y muy caliente, el agua se evapora rápidamente y queda el polvo de café.
Por lo que respecta a la liofilización, la infusión de café se congela, se trocea y pasa por un túnel donde se somete a vacío (muy baja presión). Después pasa por una aspiradora de secado, donde el hielo se evapora y quedan solo los cristales de café soluble.
Recetas con café soluble
Una de las ventajas del café soluble es que te permite disfrutar de una taza de café de manera rápida y con todo su sabor y aroma. Pero además, con el café soluble puedes hacer ricas recetas con las que sorprender a tu familia y amigos.
Por ejemplo el café dalgona, donde solo necesitas 2 cucharadas de café soluble, 2 cucharadas de azúcar de coco, 1 vaso de leche y medio vaso de agua caliente.
En un bol mezclas bien el café soluble, el azúcar y el agua caliente hasta que se disuelvan.
Después lo bates con una batidora hasta conseguir una crema esponjosa.
En una taza o en un vaso vertemos la leche y después le añadimos la crema de café que hemos preparado. Y listo para consumir.
Otra opción fácil y rápida de preparar es una crema de café. Para ello necesitamos 35 gramos de café soluble, 120 gr de azúcar blanco y 140 ml de agua muy, muy fría (sin llegar a estar congelada).
Otra opción fácil y rápida de preparar es una crema de café. Para ello necesitamos 35 gramos de café soluble, 120 gr de azúcar blanco y 140 ml de agua muy, muy fría (sin llegar a estar congelada).
Ponemos el agua, el café y el azúcar en un bol y con la batidora de varillas empezamos a batir. Verás como va cambiando de color y de consistencia de líquido hasta que comienza a espesar. Cuando ya esté bien consistente vamos repartiendo la crema en recipientes individuales y los introducimos en el frigorífico hasta el momento de servir. Si quieres puedes decorarla con unos frutos secos, galletas trituradas con sabor a canela o con barquillo.
También puedes utilizar esta crema para rellenar un bizcocho, acompañar un helado o para decorar una tarta.
Como ves el café soluble es un producto muy versátil, que además te mantiene todas las características y propiedades del café.
Tiempo de Café
