Muchas personas necesitan hacer una pausa para el café en su trabajo. Esa pausa es buena por diferentes motivos: ayuda a reducir el estrés, mejora la productividad y la sociabilidad y te recarga de energía para seguir afrontando la jornada laboral. No es de extrañar que cada vez haya más máquinas de café en las empresas.
Según un estudio de la Universidad de Copenhague, parar para beber un café en la oficina sirve a los trabajadores para liberar tensiones laborales de manera espontánea y comentar casos complicados con los compañeros. Además el estudio afirma que en estas conversaciones, se incrementan la creatividad y fomentan las relaciones en el entorno laboral.
Es más, esa idea de que el café fomenta las relaciones se ha desarrollado, y por Europa se está extendiendo la moda de los coworking coffee: profesionales de diferentes sectores comparten un espacio y hablan de sus proyectos e intercambian ideas mientras se toman un café.
Y además, si los trabajadores toman café juntos, también se incrementa su productividad. Investigadores del MITT realizaron un estudio con un grupo de trabajadores de un call center y se demostró que cuando la pausa del café estaba planificada para todos a la misma hora, al final de la jornada su productividad había aumentado. El consumo de café mejora el desempeño del trabajo y reduce los errores porque la cafeína permite que algunos neurotransmisores como la epinefrina y la dopamina actúen más rápidamente y nos mantienen en estado de alerta.
No hay que olvidar que esas pausas para tomar café en la oficina nos ayuda a coger fuerzas para seguir con el trabajo. Es bien conocido que la cafeína aumenta la capacidad de estar concentrados y reduce la fatiga mental, ya que es un estimulante del sistema nervioso central y produce efectos beneficiosos en la atención y la memoria.
De hecho, parece ser que la cafeína tiene un efecto positivo en la consolidación de la memoria tanto a corto plazo como a largo plazo (que es la que permite que lo que aprendemos se mantenga en nuestro cerebro). Algunos test han demostrado que las personas que les gusta beber café de manera regular realizan mejor los test cognitivos que los que no.
Otra razón de peso de los beneficios de tomar café en el trabajo es que alivia los dolores en el cuello y en la cabeza. Muchas personas pasan muchas horas delante de un ordenador, por lo que acaban apareciendo dolores de cuello, espalda, antebrazo o muñeca. Los que beben café se sienten aliviados cuando consumen esta bebida (y también hay ensayos clínicos que lo corroboran).
Y con los dolores de cabeza pasa lo mismo. La cafeína se ha demostrado que tiene valor terapéutico para frenar los síntomas de esta molestia y muchos analgésicos ya la han incorporado a su composición. Ahora se ha comprobado que por si sola también es efectiva, con lo que si te duele la cabeza en la oficina y no quieres recurrir a la medicina tradicional, prueba a beber una taza de café.