Nos encanta tomar café. Quizás por eso es la bebida más consumida del mundo, solo por detrás del agua. La bebemos porque su aroma y sabor nos parecen increíbles, pero también porque, según dicen, es beneficioso para nuestra salud. ¿Qué hay de cierto sobre esta afirmación? ¿Es el café saludable? ¿Hay un café más saludable que otro? 

Quédate leyendo este artículo mientras te acabas tu taza de café y te sacamos de dudas. 

Las propiedades del café saludable

Para comprender si el café es saludable, tenemos que ir a la base, a sus propiedades. La respuesta que obtenemos es que el grano de café está compuesto de numerosas propiedades que son beneficiosas para nuestra salud.

Uno de los más conocidos es la cafeína, que es un estimulante natural que puede mejorar la concentración, la alerta mental y la capacidad física. 

Además, el café contiene antioxidantes, que son sustancias que ayudan a prevenir el daño celular. Estos antioxidantes también pueden ayudar a prevenir enfermedades crónicas como la enfermedad cardíaca, la diabetes y algunos tipos de cáncer.

Algunos estudios sugieren que el consumo moderado de café puede tener un efecto protector en la salud cerebral. Se ha demostrado que el café puede ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer. También se ha demostrado que el café puede mejorar la memoria y reducir el riesgo de sufrir depresión.

¿Cuál es el café más saludable?

Como has visto, el café tiene numerosos beneficios que le hacen ser un café saludable. Pero, ¿son todos los tipos de café igual de saludables?

La realidad es que, aunque estas características son comunes en todo el café, puesto que después es procesado para su consumo, existen un café más saludable que otro. También influye en nuestra salud el modo en el que lo tomamos. Te lo explicamos. 

Café natural

Sin duda, el café saludable por excelencia es el café natural. Esto es debido a que conserva de mejor manera los nutrientes, sustancias antioxidantes y polifenoles que le dan las propiedades beneficiosas para nuestra salud.

El café natural es aquel que durante el tostado no se le añade ningún aditivo o sustancia, más que el propio grano, por lo que es el que mejor conserva las propiedades del café saludable. Mientras que otros tipos de tostado, como el torrefacto, añaden azúcar en el proceso, reduciendo el sabor original y las propiedades. 

Influye también el origen del grano y el modo de elaboración. La variedad arábica parece ser el mejor café saludable, porque su tostado a menor temperatura hace que tenga menos cafeína y más antioxidantes.

En cuanto a la elaboración, es mejor el café filtrado, ya que contiene menos ácido y colesterol. 

Café orgánico

Otra opción de café saludable es el café orgánico. Este tipo de café está relacionado con su cultivo y elaboración. 

El café orgánico es aquel que se cultiva de manera ecológica, sin utilizar fertilizantes o pesticidas químicos en las plantaciones. Así pues, se garantiza un café saludable de gran calidad que conserva todas sus propiedades naturales.

La forma más saludable de tomar café

Visto lo visto, podemos llegar a la conclusión de que el café saludable es aquel que es orgánico, con un tueste natural, de variedad arábica y filtrado. 

No obstante, en el café saludable también entra en juego el modo en que lo tomamos. Para que el café sea beneficioso para la salud, debemos tomarlo con moderación y de manera responsable, nunca más de 3-4 tazas al día. Y siempre que sea posible, tomarlo en aquellas horas que es mejor para el rendimiento de nuestro organismo. 

Además, por mucho que usemos un café saludable como el que hemos comentado anteriormente, hay que tener en cuenta que, si después se le añade azúcar, cacao, leche, nata… sus propiedades cambiarán y puede que no sea tan saludable.

Lo importante es que, tomes el café que tomes, lo disfrutes; y que de vez en cuando no pasa nada por permitirse un capricho.