Las propiedades del café y sus beneficios para la salud son numerosas según muestran muchos estudios científicos.

Tantos que resulta difícil destacar las conclusiones de unos sobre las de otros sin caer en el error de omitir aspectos importantes y relevantes para grupos específicos de población que podrían beneficiarse de ellos.

En esta ocasión queremos relacionar esos otros beneficios quizá no tan conocidos que hacen del café una bebida excepcional que merece la pena incluir con equilibrio en nuestro día a día. No en vano, es la bebida natural más consumida en todo el planeta después del té y, salvo que exista alguna prescripción médica que lo desaconseje, os animamos a seguir disfrutando de ella, y no solo por sabor y su aroma inconfundibles.

El grano de café contiene alrededor de 1.500 compuestos, de los cuales muchos tienen efectos beneficiosos para la salud. Una de las propiedades del café más conocidas son sus efectos antioxidantes.

Efecto antioxidante del café

De hecho, el café se encuentra en el puesto nº 6 de los 50 principales alimentos que contienen antioxidantes, según la revista The American Journal of Clinical Nutrition. El café tiene un alto contenido de polifenoles, compuestos bioactivos que previenen las alteraciones funcionales y estructurales relacionadas con diversas enfermedades.

La investigación sobre la cafeína ha pasado de ser una simple curiosidad para convertirse en una esperanza para la identificación de dianas que pudieran tener interés terapéutico y/o profiláctico.

Se ha observado que su ingesta parece limitar y/o prevenir la progresión de trastornos crónicos como la diabetes, ciertos tipos de cáncer y las enfermedades neurodegenerativas.

Por ejemplo, la cafeína ejerce efectos claros en la cognición de personas estresadas, ya sea por fatiga o por falta de sueño. Asimismo, tiene efectos beneficiosos aún mayores en la cognición de individuos de edad avanzada y atenúa el declive cognitivo asociado.

La cafeína y los antagonistas de los receptores de adenosina son particularmente efectivos para prevenir los déficits de memoria. Por eso se le considera un elemento natural muy recomendable para hace frente al Alzheimer.

Nadie pone en duda que el café es un psicoestimulante y  que su ingesta da lugar a una conjunto de sensaciones subjetivas como la de bienestar, confianza, motivación, alerta, vigilancia, eficiencia y concentración.

No es de extrañar por tanto que el café sea el psicoactivo más consumido en el mundo y que sea considerado un excelente antidepresivo de acción suave que no nos ocasionará ningún efecto secundario como el de ciertos fármacos.

Todo ello gracias a una variedad de moléculas con actividad biológica que consiguen efectos tales como la disminución de la fatiga y la mejora del estado de ánimo.

El café bloquea los receptores de la dopamina, ese neurotransmisor relacionado con la ansiedad y el estrés. En caso de que este neurotransmisor esté sobreexcitado, caemos en el riesgo de padecer episodios de depresión.

El café aumenta los niveles de adrenalina

Otra de las propiedades del café es que aumenta los niveles de adrenalina. Lo que se traduce en que las células grasas descomponen la grasa corporal y la liberan como ácidos grasos libres, lo que usamos como combustible cuando hacemos ejercicio.

Este es uno de los principales motivos que explica por qué los deportistas toman café en cantidades muy exactas de cafeína antes de competir. Sus efectos actúan de forma muy positiva a nivel muscular.

Además, puede resultar muy efectivo para reducir ese dolor tensional de cuello y hombros ocasionado por el estrés o la sobrecarga muscular. Un estudio realizado por el National Institute of Occupational Health (Noruega) afirma incluso que tomar un café antes de trabajar delante del ordenador reduce el riesgo de sufrir dolor articular.

El alto contenido en antioxidantes del café lo convierte en un importante acelerador del metabolismo y, por lo tanto, una bebida recomendable para quienes necesitan bajar de peso. Aunque algunos estudios señalan que, si bien es cierta esta afirmación, aún hacen falta más evidencias científicas al respecto.

Para aprovechar todas las propiedades del café es necesario seguir una dieta variada y equilibrada donde restrinjamos el consumo de grasas saturadas, dulces y bebidas gaseosas.

Finalmente, no podemos olvidar que el café es rico en vitaminas B, y minerales como el fósforo, calcio, hierro y magnesio, todos ellos fundamentales para un equilibrio nutricional y desarrollo de nuestras funciones vitales.

Tiempo de Café