¿Quieres saber cómo hacer café con leche condensada? Si es café y lleva leche condensada, entonces es un bombón. Pregúntaselo a cualquier valenciano. Así es como se conoce a esta delicia preparada a base de café expreso y leche condensada de aspecto irresistible, sabor intenso y muy dulce, perfecto para levantarse de las largas sobremesas con un extra de energía.
Aunque ya está extendido por toda España, el bombón es una bebida nacida en Valencia a la que nadie se resiste y que se consume cualquier día del año. Incluso en los meses de verano es típico pedir que sea “del tiempo”, es decir, acompañado de un vaso con hielo. Así disfrutamos de su sabor y, a la vez, nos refrescamos.
Ingredientes y detalles para hacer un buen bombón
Todo lo que necesitas para preparar un buen bombón es leche condensada, café y espuma de leche. Las proporciones son importantes, pero puedes variarlas a tu gusto. E incluso puedes añadirle tu toque personal espolvoreando un poco de cacao, canela o café soluble antes de servirlo.
Aunque se trata de una preparación muy sencilla, hay que prestar atención y mimar los detalles. Y la presentación es uno de los más importantes.
Parece un detalle sin importancia pero elegir el vaso donde lo vas a servir es la clave para conquistar a tus comensales con el mejor bombón.
Tiene que ser un vaso pequeño y de cristal. Así te lo servirán en cualquier cafetería. Y es que la gracia de este café está en el marcado contraste de colores que se mantienen separados por la distinta densidad de leche condensada y el café. Por eso decimos que la presentación es clave para saber cómo hacer café con leche condensada.
Y también es importante el orden en que lo preparas. Para empezar tenemos que poner la leche condensada en el fondo de un vaso. La proporción correcta consiste en llenar el vaso hasta la mitad y completarlo con café recién hecho y bien caliente.
Pero no lo llenes hasta el borde, no hay café con leche que se precie que no presuma de un acabado espumoso. Y te vamos a explicar como conseguirlo.
Cómo conseguir un acabado espumoso en tu café con leche condensada
Puede ser que en casa no dispongas de una máquina de café con el típico manguito de agua a presión para sacar la espuma de leche, pero no es imprescindible. Una sencilla manera de conseguir espuma de leche para tu bombón es calentar la leche en un cazo o en el microhondas, ponerla en un bote con tapa y agitarla con fuerza durante unos segundos.
Verás que consigues en tan solo unos segundos una textura espumosa, perfecta para terminar tu elaboración.
Utiliza una cuchara para recoger la espuma de leche que tienes en el bote y ponerla con cuidado sobre tu bombón. Ahora que ya lo tienes listo, es el momento de darle tu toque personal. Nosotros apostamos por un toque de canela, o bien de cacao puro en polvo.
Es un maridaje perfecto en ambos casos y un contraste muy interesante para una bebida que resulta especialmente dulce.
No hace falta que expliquemos que esta es una bebida muy calórica por la cantidad de azúcar que contiene la leche condensada. Así es que puede ser interesante que te reserves el placer de hacer un café con leche condensada para las ocasiones especiales. O bien puedes disfrutarlo sin sentirte culpable.
Un bombón es una alegría y una fuente de energía que, en muchas ocasiones, es muy necesaria.
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